miércoles, 17 de diciembre de 2014

De fallas en diciembre, de esos cabrones de Madrid y de los cangrejos de Llorente

Las fallas. Esa fiesta que tanto nos gusta a los valencianos, en la que quemamos el trabajo de todo el año para volver a empezar de nuevo. Generalmente las fallas son sinónimo de alegría, música, color, fiesta y pólvora. Nos gustan tanto las fallas a los valencianos, que este año hemos decidido adelantar a diciembre de 2014 las de marzo de 2015. Y las concentramos entre la avenida de Suecia y la de Aragón. Y quemar ninots no mola, se queda corto. Vamos a quemar "Nunots", a chavales de veintipocos años, al presidente (no al de la falla) y hasta a esos cabrones de la policía que no nos dejan pasar latas de bebida al circo romano. Ups, ¿circo romano o estadio de fútbol?

Y es que los valencianos somos así. Cuando no nos gusta algo, a tomar viento, fuera, fuig, hay que cargárselo. Lástima que no hagamos eso con nuestros políticos. O igual es que somos bobos y en las cosas no importantes nos encanta quemar todo y en las cosas del día a día nos encanta que nos sodomicen. Como dicen por ahí "si los valencianos fuesen negros, votarían al Ku Klux Klan".

Otra de las cosas que nos mola mucho a los valencianos es ser unos sobraos. En nuestra tierra hay dos frases míticas "No tienes huevos" y "això ho pague jo" (disculpad por la más que posible falta de ortografía). Quizá eso se contagie a quien viene de fuera, de Coslada, de Portugal, de Alemania, de Madrid o de Brasil y pase lo que pasa anoche. 1-2 en el partido de ida. 1-0 al cuarto de hora o así. Ya lo hemos hecho todo. Vamos tan sobrados que en una contra para un 2-0 y acabar con la eliminatoria, en vez de ejecutar como ejecutabas cuando eras suplente del suplente, tiras una vaselina y la cagas. Y poco después, falta tonta, despiste en la defensa y 1-1. Bah, aún tienen que marcar dos, vamos sobraos. Y poco después... 1-2. Ups. Y entran los nervios. Y las prisas. Y resulta que la sobrada de jugar con un equipo en el que el más mayor tiene 25 años te juega una mala pasada. Y anulan un legal al Rayo. Y después le conceden uno ilegal, 1-3. La cagamos.

En un alarde de falta de autocrítica, ese portugués que quiere parecerse a Mourinho (que ya sabemos los valencianos que ese Mou no vale una mierda), se carga a tres chavales y saca a los buenos. Eso sí, el muy mamón no coge el micrófono del speaker y se caga en los jugadores al descanso. No es autocrítico, no dice eso de "gigante dormido", "he sentido vergüenza de mis jugadores" y los aplaudidos "huevos y cojones". Y justo cuando salen los buenos, el partido cambia. Pero ya no vale para nada. Porque Nuno nunca da oportunidades a nadie, no rota. Pero hoy que ha rotado, ya le vale, es lo peor de entrenador.

El caso es que el equipo acaba solucionando el marrón. Entra la experiencia al campo y entran los goles. Entre otros ese Negredo que no vale nada porque no mete goles y ya sabemos que los mejores jugadores de la historia lo son porque han metido más goles que el resto (por eso Salva Ballesta ha sido mejor que Zidane, Mista mejor que Baraja y Paco Salillas mejor que Ayala). Y es que cuando juegan los buenos generalmente ganas. Pero para que sean buenos, algún día han tenido que ser jóvenes. Y partidos como el de ayer son los que en un RPG te suben dos niveles de golpe, porque cuando solo quedaba un último golpe por parte del jefe del final del capítulo, consigues esquivarlo, le das tres golpes y te lo cargas.

Pero es que además tenemos que luchar contra esos cabrones de la prensa de Madrid. Nosotros los valencianistas, que somos unos santos, que nunca criticamos a nadie, no nos merecemos esto. Todo eso es una gran mentira, y para muestra todos estos mensajes de ánimo, de alegría y de apoyo:
















































Como podéis ver, los valencianos no criticamos, todo son mentiras y manías que nos tienen los medios de Madrid.

Y el caso es que a mi tampoco me gustó la primera parte del Valencia, como no me gustó parte del partido de ida, como no me gustó en Granada y como me decepcionó contra el Athletic de Bilbao. Pero partidos como ayer suceden, nos han pasado desde que tengo uso de razón: Karlsruhe, Getafe en copa, Madrid en Supercopa, Villarreal en copa, Levante en liga, Athletic en liga después de ganar la copa, toda la época Koeman exceptuando la copa del Rey, Dinamo de Kiev, Nápoles... porque esto le pasa a todos los equipos.

Podemos ver el vaso de dos formas, medio lleno o medio vacío. A fecha de hoy, este equipo me ha dado más motivos para creer que para quemarlos. Es lógico que haya partidos malos, esto es fútbol. Hasta los equipos más grandes de la historia los han tenido, ¿íbamos a ser menos nosotros? (el primer año que casi somos campeones de Europa perdemos los 4 primeros partidos contra unos equipazos de escándalo como el Racing de Santander y el Alavés en casa, y el Espanyol y el Betis fuera, más empate en casa contra el Valladolid). Pero además de eso, la clasificación es esta:





Con un equipo nuevo, joven y de poca experiencia somos quintos a dos puntos de Champions y cuatro del actual campeón, siendo el tercer máximo goleador y el segundo menos goleado, con la tercera mejor diferencia de goles. ¿De verdad veis esto tan mal? ¿De verdad un entrenador tan malo tendría al equipo ahí? ¿De verdad se tiene que ir Lim nada más llegar? ¿De verdad os ha traicionado Salvo? Un poquito de reflexión, por favor. Y echarle un vistazo a este artículo de Desmemoriats en Plaza Deportiva: http://www.plazadeportiva.com/ver/29930/-bienvenidos-al-puber-team-.html

Paciencia, señor@s. Hay que confiar en este equipo. Ya vendrán las fallas en marzo y quemaremos lo que haya que quemar, si hay que hacerlo, en junio. Yo en este momento prefiero disfrutar, y no quedarme con la sensación de aquella historia de los cangrejos que contó en su día Llorente: "en una olla los cangrejos americanos se ayudan para salir, pero los valencianos se joden unos a otros y al final se perjudican todos".




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