sábado, 31 de enero de 2015

¿Por qué tener un blog?

Hace tiempo que quería escribir este artículo, y quizá hoy es el momento de hacerlo. He tenido la fortuna de que a partir del lunes empiezo un nuevo ciclo en mi vida y eso va a ocasionar que no tenga tanto tiempo para daros el coñazo, ¡¡¡así que enhorabuena!!! Por otro lado toca aprovechar el #SMMDay que se está celebrando hoy en Alicante y al que no he podido asistir, aunque no habrá sido por falta de ganas. A ver si hacen uno pronto en Valencia y así lo tengo más fácil para poder ir.


Más de una vez me ha preguntado la gente: "¿pero eso lo lee alguien? ¿Por qué tienes un blog?". La verdad es que las cifras desde navidad de 2014 están siendo increíbles, llegando a un número de visitas que no imaginaba ni en mis sueños más húmedos. Pero no son las visitas lo que me importa, si simplemente quisiese obtener mayores números en las estadísticas subiría fotos de chicas ligeras de ropa, como hacen otras webs que se supone que no van de eso (¿eh, cuantodanio.es?), y asunto resuelto. Desde el día de nacimiento de este blog, la idea principal del mismo ha sido ofrecer contenido de calidad con una temática variada. Sí que es cierto que los primeros artículos eran una mezcla de asco y pena, por eso los eliminé. Artículos llenos de mierda pesimista y lamentable.

Y el blog fue evolucionando poco a poco. Como podéis leer en la cabecera, aquí se habla de muchas cosas, pero de lo que no sé, no hablo. Y así va a seguir siendo. De ahí ha nacido la evolución, de las ganas de crecer y de ser una persona con multitud de inquietudes. Últimamente he empezado a escribir acerca de cine o de distintos restaurantes en Valencia. Y he sido bastante crítico con los segundos, la verdad. Hay quien puede pensar que es un tipo de pedantería o simplemente intentar ganar notoriedad (ya sabemos que se suele hacer más caso a las críticas negativas que a las positivas), pero nada más lejos de la realidad, el objetivo principal es ayudar tanto al consumidor desde un punto de vista totalmente neutral, como al dueño del establecimiento. A mi me jode bastante poner un 1 a "La Picaeta del Carmen", pero dentro de ese mal rollo, lo que más me gustaría es que ese artículo llegue a los ojos del dueño del restaurante y le dé un plus de calidad al mismo. Porque al final, toda crítica que se hace aquí es constructiva.

Como he comentado antes, soy una persona con multitud de inquietudes. A mi no me vale un "las cosas pasan porque sí y ya está". Soy de la opinión de que todo tiene su por qué, y de ese por qué hay que aprender para mejorar o simplemente corregir errores. Muchas veces esa inquietud es la que me lleva a sentarme delante del ordenador y dedicar un par de horas a escribir artículos que ni siquiera sabes si va a leer alguien. Eso sí, cuando lo lee alguien, te alegras, y siempre te alegras más si te leen 2000 que si te leen 20, o si te leen 20 que si te leen 2.

Igual me meto en un charco si digo que es sorprendente la cantidad de gente que no tiene inquietudes hoy en día. Nos han hecho una vida tan fácil y tan cómoda, que quizá plantearse cosas más allá de lo que vaya a pasar en las próximas 24 horas es absurdo. Vas al trabajo, haces tus 8 horas, vas un rato al gimnasio, te haces la cena, consumes un poco de telebasura y te acuestas. Incrustando en esa ecuación multitud de horas de whatsapp con conversaciones seguramente intrascendentes, pero divertidas, eso sí. Hoy mismo leía el siguiente artículo, con su vídeo: http://www.playgroundmag.net/noticias/actualidad/vida-aburrida_0_1472852702.html. "Esta es la razón por la que tu vida es muy aburrida". Y quizá sea cierto. Aunque creo que se demoniza en exceso las nuevas tecnologías, o su usoY me parece un tanto absurdo, porque sin ese acceso a las nuevas tecnologías, sin ese nuevo tipo de socialización, no estarías leyendo este artículo. El que luego este artículo te parezca una porquería que no sirve ni para limpiarse el culo o que tenga algún tipo de influencia en tu persona, ya depende de ti. 

Hay que explotar las inquietudes. Soy de la opinión de que todos tenemos un don, lo que pasa es que muchas personas no conocen el suyo. Incluso vivimos en un momento en el que la gente que tiene dudas queda influenciada por el miedo (o la ignorancia) de los demás. Para muestra las ofertas de empleo. Vemos una en la que uno de los requisitos es ser autónomo y casi de forma automática la descartamos. Quien sabe si esa podía ser una de las oportunidades de nuestras vidas. Y eso lo podemos extrapolar a muchos ámbitos de la sociedad actual, incluido éste. Las primeras veces que escribes, sientes cierto "miedo" por la posible reacción de quien vaya a leerte. Incluso ese "miedo" puede existir porque crees que nadie te va a leer, y si escribes es para que te lean. En el momento en que pierdes ese "miedo", empiezas a ser tú mismo, y quizá es entonces cuando generas calidad. Pero son las inquietudes las que te llevan a escribir. Yo puedo ver un partido de fútbol, pitar el árbitro el final y pasar a otra cosa. O puedo sentarme aquí, pensar en ello y analizarlo. Y quien dice un partido de fútbol, dice una película, un restaurante o una nuevo plato que ha creado un sábado por la noche. Incluso fotografía o pintura. Todo nace de las inquietudes.


Hemos creado una sociedad donde lo compartimos todo, siempre y cuando no pueda tener un beneficio para los demás. Compartimos nuestras fotos de fiesta o de vacaciones, pero seguramente no compartamos la forma de ser más rico o tener mejores abdominales que nuestro vecino. Y puede ser que si lo haces sea con un interés económico detrás. Hay quien escribe libros para ser un superhombre, un ganador o un gran seductor y se lucra con ellos, a la vez que hace vídeos y los cuelga a YouTube incluyendo formas de tener un Cuerpo G. ¿Lo hace gratis? No, se lucra con ello. Porque el vídeo de YouTube lo verás gratis, pero el libro te cuesta un dinero importante, especialmente el último.

Y quizá yo sea un pardillo, lo hago gratis y me siento completamente a gusto con ello. Sí, según mi ex jefe soy un pardillo y tengo que ganar en picardía. Pero no me importa, mola escribir lo que sientes, lo que piensas y si puedes ayudar a alguien, ofrecerle un punto de vista distinto al suyo, o simplemente generar un poco de debate, ya te das satisfecho. Total, es lo máximo a lo que vamos a llegar, y ya es suficiente. Hay que crear calidad, no cantidad.

Me decía un amigo ayer: "¿por qué no estudias periodismo?". Si supiese la libertad que te ofrece escribir con un cierto anonimato (tenéis mi foto y mis datos de contacto en esta misma página), sin tener que seguir una línea marcada por un medio y sin sentirte en cierto modo prostituido, seguramente no me haría esa pregunta. Porque creo que lo que amamos todos los que escribimos es poder transmitir lo que piensas, y no lo que te digan que transmitas.

Y es por eso que esta tarde ha nacido un nuevo proyecto, con la idea principal de profesionalizar lo que se escribe aquí y ampliar el número de contenidos, además de la tipología de los mismos y esperemos que su calidad. Porque hay que seguir la filosofía de la mejora constante. Y si con esa mejora nos podemos convertir en un sitio de referencia en Valencia, mucho mejor. Pero eso llegará en unas semanas. De momento os invito a seguir leyéndome por aquí. Os mantendré informados.

Feliz fin de semana.

viernes, 30 de enero de 2015

La (in)cultura deportiva española

Y va y resulta que la Selección Española de balonmano juega esta tarde la semifinal del Mundial que se está disputando en Catar. ¿Lo sabías? Si la respuesta es que sí, debes ser un bicho raro. Si no lo sabías, tranquilo, eres un español normal. Bueno, si te apetece verla, es contra Francia, a las 19:00 y en TVE1 (esperaba que fuese en TDP).


Hoy iba a escribir un artículo que se titulaba "Volver a casa a los 30", influenciado por uno que leí esta semana en Playground Magazine, web más que recomendada. De hecho ya tenía el título escrito. Pero una visita al cuarto de baño me ha llevado a poder leer, vía Facebook, una entrevista a Joan Cañellas (http://www.abc.es/mundial-balonmano/catar-2015/abci-entrevista-canellas-201501262015.html) cuyo titular es: "La cultura deportiva no puede centrarse en peinados y novias". Y esa entrevista ha llevado a este artículo.

Claro que ahora viene la siguiente pregunta: "¿Quién es Joan Cañellas?". Al parecer es el mejor jugador de balonmano del mundo en este momento, y su gol a falta de tres segundos para el final contra Dinamarca el miércoles supuso la victoria de España (24-25) y el pase a semifinal. Seguramente el campeón del mundo saldrá del duelo de esta tarde.

En este momento tengo puesto de fondo "Jugones". En un país normal, la semifinal de esta tarde sería noticia de portada en cuanto a la información deportiva, pero en España la noticia del día es si le pegan muchas patadas a Neymar. De toda la vida hemos sabido que a los futbolistas les hacen pajas en el terreno de juego, los únicos a los que pegan es a los del Barça y del Madrid. Vamos, es noticia de portada que a un futbolista le dan patadas. Flipante.

La cantidad de deportes en los que España es Top a nivel mundial y que pasan totalmente desapercibidos para el público general es inmensa: balonmano, fútbol sala, fútbol playa, esgrima, pádel, waterpolo, vela, boxeo, gimnasia rítmica o atletismo (gracias, Wikipedia). También podemos incluir en esta lista el ciclismo o el motociclismo, deportes que han tenido una enormísima aceptación popular pero que, por unos motivos u otros, cada día son más minoritarios. Una de las escenas típicas del verano a principios de los 90 era quedarse dormido en el sofá viendo el Tour de Francia. La de tardes de gloria y pasión que nos brindó Miguel Induráin (al que seguro que muchos chavales ni conocen, y no hace tanto tiempo), acompañadas de unas siestas brutales con las etapas intrascendentes. O como se están cargando el espectáculo de las motos, emitiendo las carreras en diferido, cuando hoy en día tienes la información al momento.





Pero seguro que todo el mundo sabe que Cristiano ha roto con Irina (ya tengo mi oportunidad, no habrá que desaprovecharla), que Bale corre mucho y nadie se atreve a retarle a una carrera o que Mathieu ha dicho que Messi y Luis Enrique se llevan mal. Bueno, esto lo sabíamos desde hace tiempo. Pero, ¿quién sabe los lesionados que tiene el Málaga para jugar el lunes contra el Valencia? ¿Quién sabe que Luis Casimiro es nuevo entrenador del Baloncesto Sevilla? ¿Quién sabe cuál es la otra semifinal del Mundial de balonmano?
















Esa es la cultura deportiva. No saber todo de todo, evidentemente, pero sí saber que existe vida más allá del último peinado de Neymar o de si Casillas es feliz con Sara Carbonero. Porque con esa falta de cultura nos cargamos el deporte, y el deporte es muy necesario en nuestra sociedad. Además de bueno para la salud, ayuda en el desarrollo de las personas y es una buena fuente de ingresos para nuestra economía.

Pego aquí un fragmento de la entrevista al héroe de la Selección de balonmano:

"-¿Cómo lo hace Alemania?

-Vende el balonmano. Hace encuentros con los jugadores, monta espectáculos en los partidos. Un regalazo de Navidad es una entrada para el partido del día 26 de diciembre. Y les da contenidos a la prensa. Antes venían las empresas por cuestión de trapicheos, como pasa casi siempre en España. Pero ahora ni siquiera eso les interesa. Salvo la selección, que estamos muchísimo mejor que hace dos o tres años, veremos si la liga resulta atractiva para poner dinero. Los medios tienen que aportar, pero el trabajo tiene que venir de los clubes. Si te quejas de que no sales en los medios, pero no haces nada para salir no tiene mucho sentido. 

-Pero también hay mucho fútbol en Alemania.

-Pero dan muchas más páginas de polideportivo. Si los clubes lo hacen atractivo, los medios acudirán. Si no, les vale con el peinado de tal, que ha cortado con la novia. Esa es la cultura del deporte que hay en España, y cambiar eso... En algunas cosas somos muy cazurrines. A mí me da bastante asco ya el fútbol, no el deporte en sí, sino lo que lo rodea.

- ¿Cuál es el nivel económico de los sueldos en Alemania?

- En mi club el que más cobra puede llegar a 30.000 euros al mes, y el que menos, unos 7.000. Profesionales. Los júnior que en España no sé si llegan a los 500 euros, allí pueden cobrar unos 1.200. Y en los clubes de abajo, de 3.000 hasta 10.000. Más o menos pueden ir por ahí los sueldos. El medio en España, si quitas al Barcelona no llega ni mucho menos a los 1.000 euros.

- ¿Podrá arreglarse la Asobal?

- Yo espero, aunque no creo que hayan aprendido de los errores. El nivel de la liga bajó mucho propiciado por la crisis y por la poca inversión de los patrocinadores e instituciones, pero se podían haber hecho mucho mejor las cosas, desde que los clubes hubieran estado más vigilados, impedir determinadas jugadas mal hechas, las leyes hubieran sido más rígidas. Una de las peores cosas que se hicieron fue no invertir en infraestructuras y márketing. Los dirigentes preferían dar más dinero a un jugador o a fichar que invertir en el club, en tener a personas de marketing que pudiesen generar recursos a la larga. 

- ¿Qué haría usted?

- Lo primero es invertir para crecer, no crecer de golpe y dejar los cimientos mal hechos. Toda la generación que sale ahora habrá vivido una situación mas o menos buena, pero hay que cambiar las cosas. Si queremos que el balonmano vuelva a ser profesional en España hay que trabajar y volver al inicio, apostar, moverse más de lo que antes se hacía.

-¿Hay algo positivo?

-Los jóvenes tienen la oportunidad de jugar más y de crecer antes. Aunque llega un momento en el que deben salir al extranjero porque no hay nivel suficiente en la Asobal para ser profesional. "

Esto en un país que es dos veces campeón del mundo en su disciplina y va camino del tercer campeonato. Y ojo, que hablamos de un deporte que casi puede considerarse de masas, o con cierta fama. Tengo prevista una entrevista con José Grau, ex pilotari, en la que abordar como vive alguien que es un mito en un deporte minoritario. O podéis leer entrevistas de Mireia Belmonte, otra mindundi del deporte español, pegando unos rajes espectaculares a los medios. Una Mireia que siendo de las mejores deportistas de la historia de España ha tenido que salir al extranjero para tener un futuro.


Sé que me hago muy pesado cuando digo que vi el Mundial 2010 (aquí tenemos una muestra: "el Mundial" y lo asociamos a fútbol) en Estados Unidos y que la cobertura era infinitamente mejor que en España. Pero es la pura realidad. Y no solo en el fútbol, se transmitía en directo prácticamente cualquier evento deportivo, incluyendo ligas universitarias, que además contaban con miles de espectadores en los estadios (la imagen de abajo es de un partido de liga universitaria de baloncesto). Bueno, a decir verdad, en los JJOO todos somos de nuestros deportistas, esos a los que no conocemos, no sabemos ni quien son, pero bien que criticamos si no consiguen una medalla.


En fin, tenemos mucho que aprender del extranjero. Ya sé que un español con un cubata en la mano lo sabe todo, pero luego resulta que estamos a años luz en la gran mayoría de cosas con respecto a lo que se vive ahí fuera. Y el deporte es una de esas cosas. Porque padres, seguramente vuestros hijos no acaben siendo Messi o Ronaldo, pero quien sabe si puede ser un Cañellas.

Por cierto, Antena 3 Noticias no ha mencionado el partido de balonmano. Así vamos bien.

jueves, 29 de enero de 2015

De la superioridad moral de los medios de Madrid

Otra vez lo han vuelto a hacer desde Madrid. ¿Quién ha sido la víctima otra vez? El chico de moda del Valencia, José Luis Gayá.


La verdad es que ya echaba de menos los antaño habituales montajes que hacía la prensa de Madrid de jugadores del Valencia con la camiseta del Real Madrid. Porque la prensa de Madrid tiene derecho a todo, son los adalides de la verdad absoluta, los que todo lo saben, los que dicen lo que está bien o lo que está mal, los que son totalmente superiores al resto. Y el resto, pues somos de provincias, o somos paletos, o somos acomplejados. Porque ya sabéis, amigos, todo lo que se dice desde Madrid es cierto.

Parto de la base de que consumo prensa deportiva muy a cuentagotas. Escucho Gran Deportivo de Radio Esport un ratito por la mañana y el Taller Deportivo (también de Radio Esport) por la noche, y más por las risas que te echas que por información propiamente dicha. Hace años que no compro un diario deportivo, me da igual que sea de Madrid, de Barcelona o de Valencia, porque Superdeporte es un periódico bastante lamentable. Y gran parte de la prensa valenciana ha demostrado en el largo proceso de venta del Valencia lo que es: manipuladora, metemierda y vendida al poder. El único que se ha puesto del lado del club ha sido Julio Insa, pero en ocasiones se hace tan pesado que prefiero cambiar de emisora. ¡¡¡Julio, deja hablar más a tus colaboradores!!!

La verdad es que la labor de Superdeporte en estos últimos años ha sido bastante mediocre. Claro que, partiendo de la base de que el director de un diario valencianista es antivalencianista, no se puede esperar mucho de ellos. Estoy plenamente confiado en que hay muchos profesionales que valen realmente la pena y son buenos en lo suyo, pero cuando tienes un jefe como Juan Carlos Martí, poco puedes hacer. Se han cubierto de gloria con muchas de sus portadas, demostrando una chulería que no tiene el aficionado de a pie del Valencia, que ha podido encabronar al aficionado rival y que, además, gracias a la indolencia del equipo estos últimos años, nos ha hecho quedar mal.


Pero esto del Superdeporte es un juego de niños comparado con lo que hace la prensa de Madrid, los que todo lo saben y que son superiores al resto, como su amado Real Madrid. Y las semanitas que llevan últimamente, son de traca: entre la Ouija del lamentable Tomás Roncero con cuatro frikis que debió sacar de una película de Torrente, el discurso lameculos a más no poder de Josep Pedreroll a Ronaldo después de la gala del Balón de Oro en el que se dedicó a llamarnos acomplejados y demás lindezas a los que criticábamos el grito (que no el premio, ojo) del portugés, y la campaña de limpieza de imagen del luso después de la tontería que hizo este fin de semana en Córdoba.


Porque ya sabemos que Marca informa de lujo, que nunca falla, y que además es totalmente respetuoso con el equipo rival. Da igual que haya unos derechos de imagen de los jugadores, para qué van a respetarlo, hombre. Ello se curran sus montajes lamentables y a vender. Lo que no me explico es quien es tan bobo como para comprar eso. Y para muestra, la portada con el montaje de mierda (porque no tiene otro nombre) que hicieron de Villa con la camiseta del Madrid, equipo en el que militó 6 temporadas marcando 293 goles en liga:



Aquí incluso lo dan por fichado, con el sello de calidad:


Menudo equipazo se gastó el Madrid esa temporada:


Y por no monopolizar con el Valencia, vamos a poner otras portadas que debió idear la Bruja Lola:









Y luego ya podemos entrar en otro de los clásicos de la prensa deportiva madrileña: la chulería. Porque ya sabemos que ellos son más chulos que nadie y pasan por encima de todo el mundo, faltaría más. El problema es cuando vas de chulo y te parten la cara:







Y así podríamos seguir, por los siglos de los siglos.

Otro clásico más: cuando un equipo español juega contra el equipo de Raúl. Según cuentan ellos, un español siempre se tiene que alegrar de la victoria de un equipo español que no sea el suyo. Claro que si en el equipo contrario juega Raúl, ojito con lo que deseas. Porque aquella eliminatoria entre el Valencia y el Schalke 04 del 7 de España, el espectáculo que dio la prensa fue bochornoso. El equipo extranjero era el Valencia, evidentemente.

Y solo faltaban los programas de debate repelente que se han puesto de moda en nuestro país. Bueno, realmente es un conjunto de todo lo que viene siendo la prensa deportiva. Como dijo en su día Unai Emery: "vosotros dais opinión, no información". Y es totalmente cierto. Además de llenar los espacios televisivos de basura, que no información, que no interesa a nadie. Porque los resúmenes de los partidos de la jornada cada día son más difíciles de ver. E informar sobre algo que no sea Madrid, Barcelona, Atlético, Gasol, Nadal o Alonso debe estar prohibido por algún tipo de ley de regulación de la prensa deportiva. Sin ir más lejos, España está en semifinales del mundial de balonmano, e información la justa.

Siempre pongo el mismo ejemplo: tuve la suerte de ver el mundial de Sudáfrica 2010 en Estados Unidos. Es curioso que en un país de nula cultura futbolística se dé una cobertura cualitativamente superior al evento que la que se da en España, país 100% futbolero. Solo con ver los comentaristas ya te dabas cuenta de la diferencia entre unos medios y otros. Mientras aquí toca aguantar a Kiko o José Antonio Camacho (vaya, dos ex de los clubes de Madrid), en ESPN los comentaristas eran, entre otros, Jürgen Klinsmann, Ruud Güllit o Roberto Martínez. Casi nada. 




Pero aquí somos de la cultura del berreo y del Sálvame, y lamentablemente esto se está trasladando a la prensa deportiva. De pequeño mi sueño era ser periodista deportivo, creo que si ahora tuviese 10 años, no se me pasaría por la cabeza formar parte de ninguno de esos saraos. Porque España es eso, el país de los saraos, los chulos y los amigotes.

Ah, estoy deseoso por ver el trato que se le da al lanzamiento de bota de Arda Turan. Será algo residual. ¡¡¡Qué malpensado soy!!!

miércoles, 28 de enero de 2015

Diez cosas que le faltan a Valencia

Recientemente me comentaba mi amigo José Miguel que se había dado cuenta de que en Valencia no se organizaban conciertos de grandes artistas y que en otras ciudades más pequeñas y menos importantes sí. Yo le comentaba que me había dado cuenta de que se parecía al Pequeño Nicolás, y que debía sacar algún tipo de provecho de eso.
 
Como cualquier excusa es buena para escribir y generar ideas, puntos de vista y demás, se me ocurrió publicar un artículo de estos que tan de moda están ahora de "Diez cosas que..." acerca de Valencia. El enfoque del artículo es totalmente apolítico, ya que si me metiese a hablar de las cosas que le faltan a Valencia a nivel político, el artículo se titularía "Doscientas cincuenta y tres mil novecientas ochenta y nueve cosas que le hacen falta a Valencia", estaría en torno a siete años escribiéndolo y me perdería una parte importante de mi juventud. Así que paso.


Y éstas son diez cosas que creo que le faltan a Valencia y que la convertirían en un lugar más molón para vivir:

1. Un parque de atracciones permanente

A la gente le mola mucho ir a la feria, cuando la abren en navidad suele estar hasta arriba de gente y en verano más o menos lo mismo. Además, los parques temáticos más cercanos están en Benidorm y en Salou, lo que supone un paseíto importante además de pagar peaje. Si mal no recuerdo, se proyectó uno hace años junto al Bioparc, pero se quedó en otro de esos proyectos fantasma que tanto abundan en nuestra ciudad. Otro lugar interesante para establecerlo sería la zona del puerto.


2. Abrir la ciudad definitivamente al mar

Valencia es una ciudad con playa, con un paseo marítimo chulo, pero siempre ha vivido un poco de espaldas al mar. Se proyectó la salvajada de la ampliación de Blasco Ibáñez para abrir la ciudad al mar, pero afortunadamente no ha sido llevada a cabo. La apertura natural sería con la prolongación del parque del río Túria, de hecho se hizo un proyecto importante, pero como tantos otros, se ha quedado en el cajón.


3. Un puerto que pueda ser disfrutado realmente por los ciudadanos

Con la llegada de la America's Cup en 2007, se transformó el puerto de Valencia por completo y se le dio un toque moderno del que carecía anteriormente. El problema es que, una vez terminada la competición, toda la infraestructura ha quedado inservible. Sí que es cierto que Juan Roig se ha quedado con algunas de las bases para construir una escuela de negocios, pero queda muchos edificios que están en desuso y que nadie disfruta. Un ejemplo de lo que yo haría allí sería una zona turística o de ocio como Pier 39 en San Francisco (www.pier39.com). Es un lugar de visita obligatoria para los turistas, le da un toque de color a la ciudad y además genera empleo, que falta hace.


4. Mayor y mejor red de carril bici

Parece mentira que con el buen tiempo que tenemos en Valencia y siendo una ciudad totalmente llana, el carril bici que tengamos sea tan nefasto. Además de escaso, algunos tramos son totalmente absurdos porque acaban de repente. Valencia es una ciudad ideal para ir en bici, a la gente le encanta hacer deporte y encima es un medio de transporte que no contamina y fomenta la vida sana, e ir por algunas zonas de la ciudad es una auténtica locura (por ejemplo Primado Reig). Se está trabajando en un carril bici en el centro de la ciudad, pero según muchos medios especializados, sigue siendo escaso. Además, el carril bici del paseo marítimo es ridículo, y atrévete a ir en bici por el mismo paseo, que te llevas una multita a casa. Genial.


5. Ampliar las líneas de transporte urbano y reducir el precio del mismo

Justo ayer salía publicado un estudio según el cual el metro de Valencia es el peor valorado en España por sus ciudadanos. Es bastante lógico, el precio del billete es caro, a lo que hay que sumarle la gracia de tener que comprar el soporte si no lo tienes o te lo has dejado en casa, y la frecuencia de paso es bastante nefasta, además de que el horario de los últimos trenes es bastante temprano, más aún cuando en una ciudad turística como la nuestra hay mucha gente que acaba tarde de trabajar y ya no tiene posibilidad de utilizar éste medio de transporte. Además el autobús nocturno pasa cada 45 minutos, y el prometido servicio de metro 24 horas los fines de semana no acaba de llegar, por lo que la gente tiene que recurrir al taxi, más cómodo pero mucho menos económico.


6. Potenciar cines y teatros en la ciudad

Si algo echo de menos de mi infancia son los cines del centro de la ciudad. Gradualmente han ido desapareciendo, y ya se pueden encontrar con los dedos de una mano los que quedan. En este momento solo me vienen a la mente el Lys y el ABC Park. El resto se han ido a los centros comerciales, algunos fuera de la ciudad y con precios excesivos. Y no es lo mismo, al menos para los nostálgicos como yo. Tarde de cine y paseo. Eso mola. En cuanto a los teatros, la oferta es interesante, pero no se acaba de potenciar desde los medios, la promoción de los mismos es escasa y no suele ser contemplado como una primera opción de ocio. Y el teatro tiene ese "yo que sé que qué sé yo" que lo hace especial, distinto, más humano. Otra cosa a tener en cuenta es el elevado precio de la Ciudad de las Ciencias para los residentes en Valencia. Cuando viví en Riviera Maya vi que para el público local las entradas eran siempre un 50% más económicas que para el turista. ¿Por qué no hacen eso aquí? Generaría muchos más ingresos a un negocio ruinoso como ese. Además facilitaría también las artes escénicas en la calle, dando la posibilidad de ganar dinero a gente que al fin y al cabo potencia la cultura.


7. Pabellón municipal donde se puedan celebrar conciertos de primer nivel

A Valencia le hace falta un Palau Sant Jordi o un Madison Square Garden. Lo más parecido que tenemos es la Fonteta de Sant Lluis y ha quedado desfasado como pabellón referencia de una ciudad de primer nivel como debería ser Valencia. Éste es uno de los motivos por los que tampoco se celebran conciertos Top en nuestra ciudad, no hay espacios con capacidad suficiente de espectadores para estos espectáculos, y parece mentira que esto suceda en la tercera ciudad de España. Teóricamente se construirá uno junto al Nuevo Mestalla, pero primero habrá que acabar con la mole de hormigón de Cortes Valencianas.


8. Ampliar el paseo marítimo

El paseo marítimo de Valencia está bien, la verdad. Es amplio y tiene mucha vida. Además de los restaurantes, encontramos el mercado que ponen en verano y siempre hay gente haciendo deporte, lo que le da un atractivo especial. Pero no estaría mal que se ampliase hacia el norte (hacia el sur tenemos el puerto y la zona de El Saler es atractiva a nivel de flora y fauna, lo que supondría una salvajada medioambiental), llegando incluso hasta la playa de Pobla de Farnals y enlazando con su paseo hasta el de Puzol. No creo que llegue a suponer un gran desembolso económico, y podría convertirse en otra zona de referencia para gente a la que le guste pasear en bicicleta o para los runners.


9. Más espacios para perros

Si algo echo de menos en Valencia capital, son espacios para perros. Si los hay, son pequeños pipi canes en los que nuestros amigos peludos no pueden disfrutar a tope ya que no tienen espacio para nada más que para hacer sus necesidades, cuando todos sabemos lo que les encanta correr a estos bichos. Lo más parecido a un espacio canino grande es la zona del lago del Parque de Cabecera, y generalmente trae discusiones entre los amantes de los perros y la gente que no quiere perros a su alrededor. Y encima es una zona que "nos hemos apropiado" quien tenemos perro, porque realmente no es una zona canina, y por suerte la policía local suele hacer la vista gorda a que estén los perros sueltos por allí. El resto de parques suelen tener prohibida la entrada de animales, lo que es una pena. También hay que recordar a quien tenga perros, que hay que saber educarlos y que hay que recoger las cacas.


10. Abaratar los precios de las instalaciones deportivas municipales

Porque, bajo mi punto de vista, su precio sigue siendo excesivo. No entiendo que la cuota mensual del gimnasio de Orriols sea de 40 euros cuando a 200 metros, en el Centro Comercial Arena, tienes un gimnasio nuevo y con mucho mejores instalaciones por menos de 30 euros al mes. Y el resto de gimnasios municipales tampoco son baratos, cosa que es contraproducente en la era del low cost, en la que hay mucha oferta y por muy poco precio. Además, alquilar pistas de fútbol 7 o fútbol sala sigue siendo muy caro. En Marxalenes, por ejemplo, la pista de futbito de césped artificial, que además está hecha un asco, tiene un precio de 50 euros la hora. Y facilidades a la hora de alquilar, cero, que hay que pagar por adelantado y muchas veces reunir el dinero antes de tiempo no es del todo fácil.


Pues éstas son diez cosas que bajo mi punto de vista le faltan a Valencia. ¿Qué cosas crees tú que le faltan?

lunes, 26 de enero de 2015

Unai ya no corre la banda. Valencia 3 - 1 Sevilla



Si me llegan a decir hace 10 años que Valencia y Sevilla se iban a convertir en enemigos irreconciliables, no me lo creo. Por aquella época ganábamos ligas en el Sánchez Pizjuan y la afición rival se alegraba y nos felicitaba. Incluso teníamos enemigos en común, especialmente Real Madrid y Atlético de Madrid. Se puede decir que éramos equipos hermanos, de hecho el gran Valencia fue el espejo en el que se miró el gran Sevilla de Juande Ramos, un equipo era casi un calco del otro.


Pero hay ocasiones en que las cosas se tuercen para uno de los dos bandos y el otro empieza a ganar peso en el fútbol español. Se produce una inversión temporal de roles. Y en los enfrentamientos directos, lo que antes eran escenas de empatía y cariño se convierten en guerras con sus héroes pero, sobre todo, sus villanos: Dani Alves, Fernando Navarro, Roberto Soldado, Adriano, Cristobal Soria, incluso Álvaro Negredo y sus 4 goles que dejaron al Valencia fuera de la Champions después de otro arbitraje lamentable en uno de estos partidos...

El punto de no retorno se vivió la temporada pasada. Ida de la semifinal de la UEFA Europa League entre Sevilla y Valencia. El partido transcurre tranquilamente con un 0-0 en el marcador. El Valencia tiene alguna ocasión clara para estrenar el electrónico pero quien se adelanta en el mismo es el equipo local con gol en fuera de juego clarísimo de M'Bia. Se repetía la historia de aquella eliminatoria de Copa del Rey de la 2009-10 en la que Adriano marcó un gol que sería clave para el triunfo sevillista en el fuera de juego más claro de la historia del fútbol mundial. Poco después el Sevilla anotaría el segundo tanto y encarrilaría la eliminatoria. Pero en la segunda parte el Valencia se deja los complejos en el vestuario, adelanta líneas, domina el partido y llegan las ocasiones. Y casi en el último minuto, en una jugada aislada, Beto, portero del Sevilla, simula una agresión de Paco Alcácer que supone la expulsión del delantero de Torrent. Mestalla tenía un nuevo enemigo íntimo. El portugués entraba a formar parte del salón de la anti-fama del aficionado valencianista, uniéndose a otros ilustres como Mijatovic, Guti o Dani Alves.


Una semana más tarde, era momento para otra #reAMUNTada. La misión era difícil, pero no imposible. Mestalla había vivido una noche mágica en la eliminatoria anterior, cuando sus jugadores fueron capaces de remontar un 3-0 del Basilea en el partido de ida. Claro que el Sevilla no era el Basilea. Y gracias a Beto no teníamos a nuestro hombre gol. Y aún así se hizo. 3-0, todos felices y con la mente puesta en la final de Turín contra el Benfica. La cuarta ya estaba cerca, la tocábamos con la yema de los dedos.

Pero cuando hablamos del Valencia tenemos que pensar en, posiblemente, el equipo con menos suerte del fútbol español, al menos de los de arriba. Me río yo de eso de "el pupas" del Atlético de Madrid. Me río, pero no hace ni puta gracia. Minuto 92, Fede Cartabia avanza por banda izquierda y, en lugar de ir al córner a perder tiempo, centra al área donde no hay nadie para rematar. Minuto 93, ¿de verdad hace falta que recuerde como fue la jugada? El gol duele, quedarse fuera de la final duele más. Pero lo que realmente duele es que se rían en tu cara, y más alguien que ha sido un mediocre y al que le has pagado un máster de entrenador durante 4 años, y que, sin merecerlo, tiene la insignia de oro y brillantes de tu club. Insisto, sin merecerlo. Ponerse a correr la banda como un energúmeno se puede entender, marcas un gol en el último minuto después de hacer una basura de partido y tirar una eliminatoria por inepto, y llegas a la final. Pero a quien te ha dado de comer, a quien te ha ayudado más que nadie a llegar donde estás y a ser quien eres, no le debes morder nunca la mano. Y ya que la cagas en el campo, arréglalo en la sala de prensa. Pero no, ¿para qué?


Por eso anoche el partido era más que un partido, y los puntos eran más que 3 puntos. Mestalla necesitaba su revancha. Mestalla necesitaba ver a Unai derrotado y al Sevilla humillado. Y además también nos visitaba Ever "Bob Esponja" Banega, ese chaval que podría ser el mejor del mundo en su posición pero que, como no le llega la inteligencia, se quedará en una de las eternas promesas del fútbol. Y así se dio, a pesar de los constantes intentos del árbitro para evitarlo. Vaya tela con el arbitraje. Sorteo ya, por favor.

El resultado final, en un partido como el de ayer, es lo de menos. Partido trabajado para el Valencia, con ese centro del campo con 4 mediocentros que no me acaba de convencer, con un André Gomes otra vez mágico, con un Negredo que lo toca todo, con un Gayá sensacional, con un Parejo goleador, con un Enzo Pérez al que se va a criticar mucho por su alto precio, pero que va a ser imprescindible, y con un Rodrigo Moreno que vuelve a ser el de principio de temporada.

Pero si hay que destacar a alguien, para mi el héroe del partido es Diego Alves. Otro penalti parado. Detiene uno de cada dos, es algo increíble, algo que yo no he visto en mi vida. La cantidad de puntos que te da cada temporada por situaciones como esta es salvaje. Pero no solo los puntos, sino la seguridad que transmite cuando le disparan desde los once metros y el subidón que esto supone en el estado de ánimo para los compañeros. Y había quien prefería a Guaita.





Hoy no voy a dar puntos a nadie, todos estuvieron extraordinarios. Si acaso voy a dar un puntazo, y es que Unai ya no corre la banda.